DÃas
22 Mayo 2006 | MondayHay dÃas que te arañan el alma y el aliento, como aferrándose para no pasar.Y las palabras se agotan.
| 1,978 Comentarios | 169 lecturasGoogleadas
17 Mayo 2006 | WednesdayEchando un vistacillo a las últimas búsquedas en Google:
-blog "el castigador" monica. (A propósito de Cuarentena). Bueno,es un poco enrevesado,que queréis que os diga...
-"encontre una isla en tus brazos". Precioso. Tan bonito que me ha extrañado haberlo escrito en mi blog, todo tiene su explicación: Obviamente, no era mÃo...
-tengo una mujer atravesada. Lo reconozco, este post es mi debilidad.
-islas scheychelles ??? No, si desde luego,está visto que todos los caminos conducen a Roma...
Y hablando de todo un poco,¿cuál es vuestro post favorito? (Lo que hace tener tiempo libre...o acaba una viendo Humor amarillo o haciendo concursos frikis...)
| 436 Comentarios | 126 lecturasVuelve
6 Mayo 2006 | SaturdayVuelven los nervios.
Vuelve el sà o no frente al espejo.
Las esperas eternas, el temor a la impuntualidad, el mascar de chicle.
Vuelve esa horrible sensación de invalidez, de niño chico ante el mundo.
Porque hoy he quedado con ella.
Y solo eso basta para hacerme sonreÃr todo el dÃa.
Mirando los mares del sur
3 Mayo 2006 | WednesdaySuave
MartÃnez Ares
En un rincón de los infiernos un 13 noche la encontré.
Un batallón de ángeles negros bebÃan la sangre del dÃa después.
«InvÃtame a tu guarida y me convierto a tu religión,
soy un corsario sin salida, no tengo barco, he perdido el timón.»
Y asà a la hora de las brujas entre sus piernas encallé.
«Dime tu nombre y te haré una canción,
dame un segundo y no sé lo que haré.»
Suave… los labios de EstefanÃa.
Suave… sus pechos sobre mi piel.
Suave… su boca junto a la mÃa.
Suave, suave… hasta el amanecer.
Suave… se acabo la cacerÃa.
Suave… se desclavó mi ataúd.
Suave… los besos de EstefanÃa.
Suave… mirando los mares del sur.
«Dime que sÃ, me encantarÃa que te quedaras a dormir.
¿Dónde estuviste, vida mÃa? yo te llamaba y tú sin venir.
Me apretaré a tu costado, con tu calor me fundiré,
estuve un siglo encarcelado, ya estoy contigo, por fin regresé.»
Como un puñal el nuevo dÃa atravesó la habitación.
«Dime que siempre estarás junto a mÃ, dime que es cierto, que existe el amor.»
Suave… los dedos de EstefanÃa.
Suave… de la cabeza a los pies.
Suave… sus piernas contra las mÃas.
Suave, suave… maltier, maltier.
Suave… se acabó la guerra frÃa.
Suave… ya me bajé de la cruz.
Suave… las manos de EstefanÃa.
Suave… mirando los mares del sur.
Suave… la sombra de EstefanÃa.
Suave… brotando de la pared.
Suave… hasta que se hizo de dÃa.
Suave… bajando por su desnudez.
Suave… se acabó la letanÃa.
Suave… resucité y vi la luz.
Suave… los labios de EstefanÃa.
Suave… mirando los mares del sur.
Suave… mirando los mares del sur.
Suave… mirando los mares del sur.